El jueves 28 de Noviembre nos trajó a Javi Martínez de Solo es un Perro
«Soy Javi Martinez, y desde esta web voy a luchar por mejorar la calidad de vida de los perros de familia, esos que llenan de risas nuestro día a día y a veces también de preocupaciones. Voy a cambiar tus preocupaciones por simples «ocupaciones».
Hola Javier, encantado de saludarte. ¿Que te parece si empezamos conociendo más de cerca tu proyecto?
Muy buenas, vamos a comenzar tratando de contar nuestro objetivo, a lo que nos dedicamos cada día. Cuando nace “Sólo Es Un PERRO” (en el 2016) tuve claro que no quería hacer de todo lo que se puede hacer relacionado con el mundo del perro. Tenía la idea firme de dedicarme únicamente a la educación canina y el adiestramiento del ámbito de las familias. Por supuesto, de familias donde se trata al perro como un miembro más.
Siempre que hablo sobre esto explico a otros colegas que existen muchas líneas de servicio en este mundo canino. Por ejemplo, hay empresas especializadas en perros de seguridad, otras que hacen todos los días Intervenciones Asistidas, o incluso existen centros donde puedes encontrar un montón de servicios diferentes, incluso dan la opción de comprar la alimentación de tu perro. Yo quería centrarme únicamente en servicios de Educación y Adiestramiento para familias, ¡nada más!
Ahora mismo el núcleo sigue siendo el mismo, aunque hay alguna formación que abarca otros aspectos como reglamentos deportivos o el curso para Educadores Caninos Profesionales.
Aunque sea yo la cara visible, hay más entrenadores y profesionales de otras especialidades en “Sólo Es Un PERRO”.
Andrea Sancho dedica la jornada a ayudarme con todo lo que sean mails, edición de vídeos, asistencia a incidencias, y un sinfín de “fuegos” que van surgiendo a lo largo del día.
Sandra es nuestra maestra de las redes sociales, nos ayuda a crear contenido, y a personalizarlo. Mis cursos los imparto repartiendo la carga docente con Olga García, ya que cada vez más, se solapan las demandas de los servicios de educación canina
Son múltiples las entidades que se dedican al mundo canino, con esto, ¿qué creéis que pueden ser vuestros puntos fuertes o vuestros elementos diferenciadores?
Vengo de dedicarme a lo largo de mucho tiempo a la docencia, ya sea desde la empresa privada o como profesor asistente en Universidades públicas.
Me gusta enseñar, me divierte plantear formas de crear curiosidad en las familias o de realizar ejercicios guiados de empatía con humanos respondiendo preguntas sin saber que estaban hablando de su perro. Sin duda alguna, cuando disfrutas enseñando, suele llegar un momento donde lo haces realmente bien, y las familias agradecen comprender el punto de vista de su perro, la mayoría al menos.
Además, como decía anteriormente, uno de los puntos clave de “Sólo Es Un PERRO” es que rechazo todos los casos que salen del ámbito del perro social, del perro como miembro de un grupo familiar. Me han pedido en este tiempo perros de protección de fincas, perros de detección, o incluso entrenar perros para reglamentos que no conozco en detalle. La respuesta siempre fue la misma, “no, puedes buscar ayuda en la empresa XXXX”.
Javier, desde tu punto de vista ¿es difícil emprender en este sector? ¿Te encontraste alguna barrera o alguna limitación?
El mundo del trabajador autónomo no es fácil, tampoco para el que monta un restaurante o una ferretería. Las barreras nos las ponen a todos por igual. Creo que de las primeras charlas que tengo cuando alguien me dice que quiere montar un negocio es precisamente sobre tasas, impuestos, costes fijos, etc. Cuando pones todo en riesgo por un negocio, tienes que ser consciente de cada detalle antes de dar el paso. ¡La de charlas que habré mantenido sobre esto a lo largo del último año!
Desde luego que es toda una aventura. Nosotros encantados de compartir sensaciones y charlas sobre este aspecto. Por otro lado, en lo referente al mundo del perro, ¿notas algún cambio desde que te dedicas a ello?, ¿Ves alguna tendencia para los próximos años?
Yo empecé en este mundillo con mi abuelilla “Cora”. Hace 12 años salir a una pista de obediencia y decir que usabas un clicker y que jamás gritabas, asustabas, pegabas, etc. a tu perra lo ponían en tela de juicio. Tenías dos respuestas estándar ante una afirmación del estilo “entreno en positivo cada detalle de la vida de mi perra, sea o no sea deportivo”:
- Respuesta A: “entonces en algún momento no obedecerá y hará lo que quiera”
- Respuesta B: “¡mientes!, no se puede hacer esto o lo otro sin usar un collar eléctrico”
Estas respuestas eran muy directas y cientos de profesionales las daban por válidas. En muchas ocasiones se hablaban horas al acabar un seminario con un ponente “de esos modernos” sobre estos asuntos. Ahora mismo, parece que ya esas charlas se han reducido y es una forma de filtrar a “los que llegan” y todavía tienen que reafirmarse en su posición en este viejo debate.
Para los próximos años todo apunta a que la formación especializada va a seguir tomando impulso. Parece que nos hemos dado cuenta que un curso genérico no permite “meterse en profundidad” en áreas que dan para varias semanas de formación. Prueba de ello, es que hay profesionales que pasan por mis cursos para llevarse un montón de recursos para entrenar áreas tan importantes como el paseo sin tensión en la correa, o acudir a la llamada ante distracciones fuertes.
Desde luego, que gracias a esas primeras incursiones con Cora, muchas personas tuvieron oportunidad de conocer las buenas prácticas en el sector.
Por mi parte, agradecerte el sumarte a este pequeño espacio de debate y aprendizaje entre perrunos. Un gran saludo.